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Contabilidad Vs. Inflación

Durante los últimos años en Venezuela se ha generado una hiperinflación la cual tuvo su pico en el año 2018 de 1.700.000% anual y se ha mantenido en el 2019 y 2020, en 7.374% y 3.713% respectivamente. Esta situación ha conllevado una distorsión en los estados financieros, lo cual no permite ser fuente para la información financiera confiable que necesita el empresario local. Aunque se aplique el ajuste por inflación, los índices de inflación son publicados por el Banco Central de Venezuela, meses posteriores y esto genera, a su fecha, no poder tener una información actualizada y oportuna para la toma de decisiones.

Estos últimos años la contabilidad ha dejado de ser una fuente de información financiera y se ha convertido en una formalidad para cumplir con las obligaciones de tributos, contribuciones y tasas fiscales, ya que la contabilidad no está generando oportunamente la información que se requiere actualizada por el impacto de la inflación.

Actualmente la mayoría de las operaciones contables son en divisas,  por lo que se  están creando modelos financieros en monedas fuertes tales como el dólar americano, que permitan una perspectiva financiera al empresario.

Esto conlleva analizar de acuerdo a la NIC 21 la moneda funcional, la cual establece evaluar el entorno económico principal en el que opera la empresa o entidad, que es normalmente, aquél en el que está genera y emplea el efectivo. En principio las operaciones de las entidades se deben contabilizar en los términos de la moneda funcional de las mismas. Eso no priva que las entidades puedan presentar sus estados financieros en una moneda diferente a la moneda funcional (moneda de presentación Bs.). Entre los factores primarios a considerar para determinar la moneda funcional se tienen:

  • La moneda que influye fundamentalmente en los precios de venta de los bienes y servicios, así como en los costos de la mano de obra, de los materiales y de otros costos de producir los bienes o suministrar los servicios.
  • El país cuyas fuerzas competitivas y regulaciones determinen fundamentalmente los precios de venta de sus bienes y servicios.

El Gobierno Nacional actualmente permite las operaciones en moneda extranjera (dólar americano), y está implementando una monetización del efectivo en moneda extranjera, a través de la Banca Nacional, lo que va permitir registrar estas operaciones contablemente.

Si la contabilidad en este entorno quiere ser parte de la información financiera para el empresario, se debe adaptar a una moneda funcional que en este caso sea una moneda fuerte y funcional con la que se está registrando la mayoría de sus operaciones.  Esto requiere que el Estado se adapte y permita realizar todas las operaciones en moneda extranjera tales como pagos de tributos, contribuciones, tasas, impuestos nacionales y regionales.

Artículo redactado por Alfredo Hurtado | Managing Partner | Venezuela