La presencia de la mujer empresaria en Ecuador ha experimentado un notable crecimiento en los últimos años. Cada vez son más las mujeres que se aventuran a emprender y liderar proyectos de éxito en diversos sectores. A pesar de que todavía hay desafíos por enfrentar, la perseverancia y el compromiso de estas mujeres empresarias están marcando una tendencia en el país.

El pasado enero, se consolidó la Ley para Impulsar la Economía Violeta, normativa que tiene el propósito de generar mayor participación y contratación de grupos históricamente vulnerados. Con esto, busca evitar la profundización de las condiciones de desigualdad que afrontan las mujeres en el mercado laboral, minimizar el impacto negativo de la crisis económica que se encuentran y consolidar un proceso inclusivo de reactivación económica.

Los datos hablan por sí solos: en los últimos cinco años, el número de mujeres emprendedoras en Ecuador ha aumentado en un 16%, superando el porcentaje de crecimiento de los hombres emprendedores. Además, un estudio reciente muestra que las empresas lideradas por mujeres son más resistentes en tiempos de crisis y tienen una mayor capacidad para innovar y adaptarse a los cambios del mercado.

En estos últimos años, se reivindicó el rol de la mujer como actor clave del desempeño económico. En especial, se ha destacado que su participación es esencial para reactivación económica post pandémica. Es por eso que las acciones gubernamentales y del mercado laboral favorece a que cada vez las mujeres se postulen para nuevas plazas de trabajo, tengan más oportunidades proponiéndose nuevos retos y obtengan satisfacción profesional.

Según las cifras del Ministerio de Trabajo:

Aunque existan nuevas y prósperas oportunidades, aún persiste otra batalla que es la igualdad salarial. Según se estipula en el Código del Trabajo, ¨El salario (de las mujeres) debe ser de igual valor entre hombres y mujeres acorde al ejercicio de las funciones encomendadas. Los procesos de selección deben realizarse con un balance homogéneo de candidatos sin que exista ningún tipo de discriminación¨.

Se puede discutir que esta es una problemática social, es por eso que una buena educación cultural y financiera puede cambiar el mundo. En especial, los gerentes empresariales que sostienen el poder de decisión en sus manos, convirtiéndolos en otros agentes de motivación para que mujeres empresarias tomen posiciones de poder y brinden más oportunidad a otras.

Según Entrepreneurship Monitor, en Ecuador el 33.6% de mujeres, desde los 18 a 64 años, se convierten en emprendedoras e impulsan iniciativas de negocios. Este crecimiento es un reflejo de la importancia de la diversidad y la inclusión en el mundo empresarial. La presencia de mujeres líderes no solo es una oportunidad para fomentar la igualdad de género, sino que también es una forma de generar innovación y éxito sostenible en las empresas. Por eso, es importante seguir trabajando en políticas y estrategias que promuevan el liderazgo femenino y que permitan a las mujeres empresarias de Ecuador seguir demostrando su talento y su capacidad de liderazgo.

Conoce la participación en cargos directivos que están teniendo las mujeres actualmente:

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